jueves, 27 de marzo de 2014

El fin del sueño americano


Las deportaciones, en cifras
368.644 personas fueron deportadas en 2013.
10% menos que en 2012, aunque en 2014 el número está en alza nuevamente.
Unos 133.000 deportados fueron aprehendidos en el interior del territorio estadounidense.
Otros 235.000 corresponden a detenciones en la frontera.
59% estaba condenado por un crimen anterior: 216.810 casos.
Los otros 151.834 no tenían condenas previas.
4% aumentó la expulsión de "indocumentados criminales" con respecto a 2012.
La mayoría son de México (241.493), seguidos de lejos por Guatemala (47.769) y Honduras (37.049).

No hay como las cifras para describir un problema, parece. Estas líneas precedentes son el resumen de una extensa e interesante nota en La Nación sobre el tratamiento de deportación al que son sometidos los residentes ilegales -mayormente mexicanos- en la meca de la sociedad de consumo. El artículo es interesante porque expone varios puntos de vista sobre la misma situacion. Les recomiendo su lectura, es extenso pero justificado. (Hace clic acá para leerla)
-.-
Por una sinapsis rara, de esas que salen de vez en tanto, caí en la cuenta de cómo cierra un círculo vicioso y perverso. Me cuesta creer que el país capaz de encontrar un pelo de Bin Laden no sea capaz de encontrar uno por uno a los inmigrantes ilegales para deportarlos. Lo hace con algunos, como para mantener la estadística bajo control, amedrentando a todos los demás con su perfección legislativa y la inexorabilidad de sus procedimientos administrativos.

La realidad es así:
- El gran país del norte necesita mano de obra barata para sus peores empleos.
- El gran país del norte escatima los permisos legales de residencia.
- Los inmigrantes ilegales privilegian permanecer en el gran país del norte.
- Los inmigrantes ilegales ocupan los peores empleos en el gran país del norte.

El nudo del silogismo anterior está escondido en la deportación controlada de mexicanos. Son los mas numerosos, los mas fáciles de conseguir y los mas baratos de deportar, porque los echan caminando bajo el sol o la lluvia. Deportan los necesarios para que el resto tome nota de lo concreta y real que es la amenaza y se mantenga económica y cabizbaja en la base de la pirámide laboral.



viernes, 21 de marzo de 2014

Porqué nos olvidamos de todo
y creemos que de eso algo importa,
la amnesia es ceniza de pasados,
el presente es una llave,
el espejo no nos devuelve nada.

Unidos por la cintura en un mar de constelados
estamos solos o distraídos dentro o fuera de nosotros,
abrigados salvo excepciones en nuestras permeables corazas
confundiendo función y ensayos de la máquina de ser poemas.
Related Posts Plugin for WordPress, Blogger...